ECUAVOLEY: Jugadores destacados y pintorescos

En este espacio rendimos un homenaje a aquellos que luchan por abrirse paso en este deporte. El orden en que se presentan no implica ninguna categorización, obedece a la informalidad propia del ecuavoley. Si te encuentras aquí y deseas cambiar o agregar fotos, texto o videos solo comunícate con nosotros. Periódicamente iremos incorporando más jugadores.

76.- David. Procede de la “ Chemis”, Joven, alto, delgado,  tostado por el sol, servidor de elite y aunque solo acompaña se convierte en el eje del grupo con instrucciones y estrategias ganadoras. Es un líder entre los integrantes de su categoría, la primera. Su apodo tiene que ver con la historia bíblica de las vacas flacas. La velocidad, agilidad, estrategias y astucia de sus movimientos  son su principal arma. También juega cuarenta luego de la jornada de ecuavoley y según sus competetidores es de lo mejorcito que hay por aquí.

77.- Triple H. Alto, fornido,  gordo, joven, come como si fueran tres y aún no nace el servidor adecuado para su colocada, así que tendrá que mandarlo a hacer y etiquetarlo “made in Guayaquil  by Hugo. Cuando pica para colocar voltea la cabeza  dando la impresión de mirar al contrario, salta con vehemencia y tira la bola con el muñequeo adecuado  imprimiéndole fuerza y velocidad,  obteniendo alta efectividad en la colocada.  Se mueve ágilmente en la defensa llegando a bolas difíciles para que su servidor la ponga al nivel que la requiere, lo que normalmente, en su criterio, no ocurre y como consecuencia no la mete. Siempre juega por derecha  y esto le ha dado prestigio de jugador honesto.

78.- Jhovanny, Joao y familia Jhovanny Mediano, grueso, trigueño, solo juega de colocador y rara vez ejecuta una estrategia, es decir, juega solo  puesto y lo aguanta con agilidad y bravío.  Si cae una bola  a su lado su cara se transforma, balbucea alguna palabras entrecortadas  que solo él entiende, se agarra la cabeza y sus dientes rechinan. Si todo va bien, coloca técnicamente con deducción mental rápida de la  posición contraria y si le sirve Joao, su hijo,  el asunto se vuelve de honor familiar y es bastante difícil ganarle.

Joao Con solo 11 años se ha convertido en el niño precoz del ecuavoley y actualmente juega de forma regular en segunda categoría demostrando la  aptitud y actitud de un hombre adulto e incluso se empareja con estos y no le preocupa el rechinar de los dientes de su padre que para él se convierte en una palmadita de apoyo a su gestión.  Saca bolas con una o dos manos saltando o clavándose de cabeza en la salvada y luego la levanta en una servida de calidad para cualquiera y es aún mejor si lo hace para su padre. Sin restarle méritos a éste, creo que su madre merece una mención especial. Felicitaciones señora.

79.- Freddy.

Es joven, alto, grueso, atlético y medio pelado, de esos que sacan bolas  difíciles. Juega  en la tercera etapa  y es un excelente volador, pero no es muy bueno colocando, ya que siempre se queda en la red, la tira afuera o la pasa muy fácil para el contrario. Es un muchacho serio, no fuma ni bebe, tampoco es bullicioso y siempre está con una sonrisa en los labios.

80.- Ezequiel.

Es gordo, mediano y fuerte, juega de volador en la tercera categoría tirando bolas de primera y batiendo de manera taxativa y temeraria. Su físico no es muy acomodado a un jugador de voley y la parte que usa para sentarse podría ser envidiada por la misma Laura L. o J. Lo. Es normal que se disguste cuando se le menciona esto y nos solidarizamos con su reclamo

81.- Mayor.

Juega en la tercera etapa.  Es mediano de estatura, fuerte, atlético y resistente. Es mejor colocador que volador  y si no fuera porque parece un genio sin genio, ganaría todos sus partidos, porque los arma bien. Es polémico en sus reclamos, pero terminado el partido todo vuelve a la normalidad, sonríe, habla acerca de su profesión, de su trabajo e incluso ofrece a sus compañeros un refrigerio.

82.- Segundo.

Es oriundo de nuestra sierra y aunque no canta le dicen Fichamba en honor a un cantante indígena ecuatoriano que lució su estilo por España. Es servidor y volador, pero me parece que en el primero es más eficiente. En más de una vez ha sorprendido al público echándose unas palomitas, (tirarse al piso) para rescatar bolas complicadas con éxito, lo que le ha valido para ubicarse en un buen puesto en el listado de servidores de segunda categoría.

83.- Mohamed.

Es pequeño, trigueño, fuerte, según él guapo y sexy, tipo árabe, de allí su apodo. También levanta pesas y derrocha energía en el juego. Es colocador y volador y aquí hace mejor papel. Es apostador  y no se amilana ante nadie porque confía  en su análisis del partido previo a la apuesta. Como no agarra la bola en ocasiones esta pierde su trayectoria o velocidad y el público grita  “levanta pesas de cartón”.                                                                                      

84.- Aguadini.

Es miembro del cuerpo de vigilantes de transito de la provincia , mediano de estatura,  delgado,  quemado por el sol. Sirviendo o volando presenta algunas falencias, especialmente recibiendo el bate que por lo general se le va de las manos y eso le ha ganado su apodo.  Pero como colocador si recibe bien el bate y juega adecuadamente sin presentar  muchas fallas y siempre se mantiene sonriente.

85.- El Compadrito.

 Compañero de trabajo del anterior y con menos errores sirviendo o volando.  En su categoría su bate es respetado y es del tipo lojano, con la mano abierta, rápido y colocado.

86.- Parma.

Se llama Luis y parece que su negocio gira en torno a esta leche. Es alto, grueso, de bigote y pelo cano. Cuando usa sombrero le dicen “Hermano Gregorio”. Es colocador pero solo usa dos manos y no juega de otra forma. Es difícil armar partidos con él porque  siempre quiere ventaja, pero una que otra vez también ha caído. No le gustan los insultos y tampoco los practica.

87.- Pepe

Es médico de profesión, trabaja en la seguridad social, alto, delgado  y en la noche le afectan los reflectores. Juega solo de volador y en su categoría lo hace aceptablemente, ayudando a rematar a veces impecable y  en otras como que se le fue la luz y cayó a su lado.

88.- Mi sub. También le dicen “ojo de águila”.  Es alto, gordo, no es muy ágil pero se ubica bien. Sirviendo o volando es temido por su segundeada ya que tira la bola fuerte y rápido luego de observar la posición contraria. A pesar de que la bola ya ha caído él sigue corriendo detrás de ella sea en su lado o en el contrario, pero nunca la pasa y recibe asesoramiento exterior porque juega con su móvil en la cintura.

89.- Leo.

Es de los de Duran, bastante joven, delgado y pequeño, no creo que pase del  1,60 m, pero es bastante ágil y aguerrido, se nueve rápido,  más de lo normal y debe serlo, porque mientras su contrincante da un paso, él debe dar dos para recorrer la misma distancia, pero creo que en realidad da tres. Lo propio sucede con la red, se la colocan a 2,80 m. de altura que es para jugadores altos, pero él se defiende en ella, como?, saltando casi en la misma proporción que debe correr. También baja la mirada  para ver al contrario, bueno, tal vez deba  alzarla para ello. Es un muchacho digno del apoyo de sus coterráneos y admiración de todos. Juega en primera categoría.

90.- Leo.

También es de Duran, compañero del  anterior, pero este es alto,  grueso,  fornido y resistente. Se lo ha visto colocar con buena  chequeada y ganar partidos casi perdidos, parece ser  buena estrategia. Entre sus meritos, el mejor, la virada al palo del colocador que  parecería no tener antecedentes y a la vez es infalible.

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